SEMANA DEL ARTE

Nº7

 
 

Resulta indescriptible la felicidad que me produce encontrar un momento de calma en el que poder sentarme a escribir sobre esto, haciendo un ejercicio de repaso sobre todo lo ocurrido estos días pasados durante la Semana del Arte en Madrid, y probablemente la edición más importante hasta el momento para mí, por haber sido la primera vez que mi obra ha sido expuesta. Pero de esta sensación hablaremos luego, porque sin perder perspectiva siempre he resultado ser una cronista visual (y no solo) de este gran evento, y por ello me gustaría contaros lo que he visto, descubierto, de lo que me he enamorado y de cómo he vivido estos días felices y agotadores a partes iguales.

 
 

fig. 01 ARCO | Artika Books

 

Es importante ponernos en situación, este año es el primero en el que celebramos esta semana sin restricciones de aforos ni rostros cubiertos por mascarillas, además, el año pasado el comienzo de esta semana estuvo señalado por el inicio de la guerra contra Ucrania, en el que como espectadora y narradora en aquel momento expresé:

“La vida que nos sucede mientras en otros lugares del mundo todo se desmorona debería importarnos, y mucho.

[…] Ayer estuve hablando con un periodista turco, especializado en diplomacia que me miraba y me decía, hoy es un día complicado para hablar de cualquier cosa que no sea lo que está pasando en el este de Europa. Más tarde, intercambiando comentarios durante mi visita a Art Mad hablé con un galerista que me dijo que no concebía el arte de su espacio si no era como motor de cambio. Y efectivamente, qué razón tiene y cuánto apoyo ese concepto de que el arte realmente está ahí para hacernos sentir incómodos de alguna manera, para removernos, para hacernos reflexionar desde lo que sentimos cuando lo contemplamos.

[…] Y me produce tristeza, porque estoy sintiendo que desde el mundo del arte se podrían, in situ, realizar acciones que concienciasen a la gente de lo que está sucediendo en este preciso momento, porque no deberían existir artistas sin ideas críticas, ni arte sin conciencia social y política.

A mí a veces todo me resulta frívolo, como la estabilidad de una vida que parece lineal y ajena a un conjunto global del que todos formamos parte, y a veces sólo intento refugiarme en la belleza de lo que contemplo por mucha fealdad que la envuelva”.

fig. 02 ARCO | Galería The Goma

 
 

Frivolidades aparte, sigo sin poder evitar entrar en un espacio tan inmenso lleno de obras de arte y no sentir ese cosquilleo, esa sensación de saber que voy a disfrutar paseando, aprendiendo y fotografiando arte. ¿Y con qué me quedo de la visita fugaz que hice a ARCO? Pues con la propuesta de la Galería RocioSantaCruz con su obra de Orlan y el proyecto ICONA de Toni Amengual.

 

fig. 04 PAUL MPAGI SEPUYA | Mirror Study | Fuente foto: Matthew Marks Gallery

 

También fue un gran descubrimiento para mí poder contemplar algunas de las obras del fotógrafo Paul Mpagi Sepuya en el stand de la Galerie Peter Kilchmann hasta entonces desconocido para mí. Sin duda alguna fotografía intimista y sensible hasta el punto de inquietarme y querer explorar el autorretrato de una forma diferente.

 

Podría hablaros de muchas de las cosas que vi, pero no quiero dispersar mi atención en las obviedades. Por ello, volviendo a los centros, destacar por último que probablemente el stand donde pasé más tiempo fue el de la Academia de España en Roma. Algo así como “llegar y besar el santo” es la expresión más adecuada para describir los primeros minutos en la feria, en los que de pronto sentí cómo ese video en el que se veía Roma, a los becarios en sus estudios y todo lo que esa experiencia supone me dejó (de nuevo) hipnotizada durante unos pocos minutos que bien habría podido alargar durante horas.

A veces tenemos los objetivos claros, pero encontrártelos de frente y emocionarte tan solo imaginándolos tangibles es y será siempre la clave instintiva a seguir.

 
 

fig. 06 ¡Valor y al toro! | Obra de Jordi Díaz Alamá | Inéditad

Llega la hora de desplazarse hasta Art Madrid, donde probablemente haya la luz más bonita que se puede pedir para fotografiar arte. ¿Recordáis que en el texto que escribí el año pasado intercambié opiniones con un galerista que me dijo que “no concebía el arte de su espacio si no era como motor de cambio”? Pues bien, ese es Luis López, director de la Galería Inéditad que bajo mi punto de vista, ha traído una de las propuestas más atractivas a la galería Cibeles este año.

Bajo un proyecto comisariado que busca la “deconstrucción de la realidad”, he podido profundizar en uno de los artistas de su galería, Jordi Díaz Alamá, cuyo trabajo me ha enamorado profundamente.

 

fig. 07 Trompetista I | Obra de Jordi Díaz Alamá | Inéditad

 

Dice Jordi que “El arte figurativo nunca pasará de moda porque transmite un mensaje que todo el mundo reconoce”, y no puedo evitar pensar en esa frase del artista Jago que dice algo así como: “Si haces una escultura, escribes un texto…y lo tienes que explicar, hay un problema”.

Como no podía ser de otra manera yo soy y seré siempre amante y defensora de lo figurativo, y más después de haber contemplado de cerca a este Trompetista en el que no dejo de pensar.

 
 

fig. 08 Canto I Dante | Fuente: Díaz Alamá

 
 

Hablando con Luis y profundizando en el trabajo de Jordi hablamos también sobre lo figurativo de Roberto Ferri, y me habla de la exposición “Si volse a Retro” en la que Jordi expuso el año pasado su visión sobre el Infierno de la Divina Comedia de Dante.

“Fermi tutti”, como se diría en italiano, pero creo que su visión personal de Dante sea la más atractiva que he visto nunca.

 
 

fig. 09 Bastidores | Marina Benito | Just Mad

 

La realidad es que este año me ha dado poco tiempo a explorar en la amplia variedad de ferias programadas, porque ahora vamos a pasar a esa otra perspectiva que ha supuesto vivir esta semana desde el otro lado, el de la artista. Por ello me gustaría empezar hablando de lo que ha hecho posible que yo pueda estar exponiendo este año, y es que sin Beatriz Pereira, directora de Galería Beatriz Pereira nada de esto habría sido posible.

Lo hemos comentado mucho últimamente, pero me gustaría visibilizar a través de este texto dos aspectos muy importantes: el primero tiene que ver con la celebración de las ferias, que se nutren del arte y las propuestas de las galerías que participan en ellas, y el segundo tiene que ver con la inversión que esas mismas galerías realizan para poder estar presentes con su propuesta artística. Un trabajo sin duda arriesgado en el que creer en algo, querer enseñarlo al mundo y que este lo valide de alguna manera, es reafirmar que el proyecto que estás creando no está mal encaminado.

Sin duda alguna, un paralelismo con el trabajo del artista en el que todo el esfuerzo emocional realizado durante mucho tiempo se pone en común para exponerlo al mundo en el breve periodo de unos cuatro días.

 

La primera apuesta fuerte este año la hace en Just Mad con el solo project de la artista Marina Benito. Qué puedo decir yo, que lo he vivido desde dentro como parte del equipo y he podido contemplar de cerca el montaje, los nervios, los abrazos y las expectativas. La realidad de todo esto es que poder expresar todas esas emociones es una de las cosas más complicadas con las que me estoy encontrando a lo largo de esta Acta Diurna.

 

fig. 10 Ginebra I | Marina Benito | Just Mad

 
 

fig. 11 Bea y Marina

 
 
 

Desde aquí quiero mandar mis felicitaciones por el éxito cosechado durante estos días a mis compañeras y amigas, siendo plenamente consciente y desde todos los puntos de vista posibles de la ilusión y el esfuerzo con el que se ha desarrollado este proyecto.

Y ahora llega ese momento en el que os explico esa segunda apuesta por parte de Galería Beatriz Pereira, esta vez en Hybrid Art Fair en la que he tenido la oportunidad de exponer por primera vez mi obra en Madrid. Pero antes de hablaros de mí quiero dejar la referencia de una artista con la que he podido compartir espacio estos días en el Petit Palace Santa Bárbara. Ella es María J.L Hierro, cuyo trabajo vengo admirando desde hace ya años. La constancia con la que continúa explorando la forma de hacer arte es una absoluta referencia para mí, además estoy orgullosa de que en mi pequeña colección haya dos de sus piezas.

 
 

Me resulta tremendamente complejo describir todo lo que ha sucedido a lo largo de tres días, así que en un ejercicio en el que el ego y la constancia luchan de forma continua a lo largo de este camino elegido en el que la niebla a veces se disipa para poder ver con un poco más de claridad el suelo sobre el que piso, he creído oportuno iniciar este relato desde otra perspectiva con el primer texto que recibí tras haber creado el libro “La bellezza”.

 
 
 

fig. 14 Libro “La bellezza” | Paula Rosell

 

fig. 15 Libro “La bellezza” | Paula Rosell

 

“Si tengo que definir belleza, por tu actitud, por la manera de sentir, por tu expresividad, por ese interior intenso que transmites al exterior, por esa sensibilidad que mantienes permanente, por ese flujo de ideas en constante movimiento, por esa elegancia en las formas y en su contenido, por esa lucha permanente en crecer y no quedarse, en esa expresividad continua de emociones, con esa inquietud innata, y tantas más.

Esa eres tú, Paula”.

En el mismo día en el que redacto esta Acta Diurna he mantenido una conversación con uno de mis pilares emocionales, Sandra Rojo (gracias a la cual creo haber encontrado la determinación de no dilatar más este texto) y en esa conversación ha salido un tema en el que últimamente reflexiono mucho, el ego como motor pero no como fin del artista, y también hemos hablado de lo solitario del acto creativo, un ejercicio en el que para poder exponer hacia afuera es esencial saber mirarse dentro. Tengo que ser sincera, cuando leí esta dedicatoria para el libro me emocioné, pero no por eso del ego, sino porque mi parte más solar se sintió completamente identificada con lo que leía, y me alegro infinitamente de saber que esa es la emoción que llego a despertar en algunas personas.

Ya no hay hilo conductor, ya sólo existe la expresión de las emociones que sentí, los recuerdos que me llevo, las personas que han pasado y los comentarios que he recibido sobre mi trabajo, que considero que junto con las reflexiones recogidas anteriormente son todo lo que necesito para encapsular esta vivencia. Por este motivo he iniciado hablando del libro de páginas vacías que he creado con motivo de la feria y que ahora me acompañará allá donde vaya para recoger tantas ideas. Ha sido maravilloso veros escribir en él vuestro concepto de “bellezza”.

 

fig. 16 Libro “La bellezza” | Paula Rosell

 

Esta ha sido mi propuesta, una serie de representaciones que recogen desde el interior de una habitación mi visión interior de Roma. Imágenes que forman parte de mi proyecto fotográfico non - finito AMOR e SAPIENZA que continúa presente como eje principal de todo mi trabajo artístico y del que últimamente he aprendido a crear más desde sus vacíos que desde su presencia.

 
 

Si hay palabras que he escuchado de forma recurrente en las personas que han contemplado mi obra de cerca estos días ha sido “tranquilidad”, “calma”, “elegancia”, “fina”, “detallada” (entre otras), pero me quiero quedar con la descripción que hizo una de mis compañeras de habitación y artista Imelda que describió mi fotografía como esa sensación que tienes cuando vas por una carretera, fuera llueve y escuchas la lluvia golpear los cristales, pero de pronto entras en un túnel y el ruido para. Ese momento de calma, esa pausa es para ella mi fotografía.

 
 

fig. 19 INT. Habitacion 117 | Inés Alonso, comisaria del proyecto | Galería Beatriz Pereira | Hybrid Art Fair

 

Ha sido una experiencia maravillosa, porque he podido hablar de lo que creo sin necesidad de hacerlo a través de ese intermediario digital llamado pantalla al que nos hemos mal acostumbrado. La palabra frivolidad a veces retumba de nuevo en mi cabeza, y donde a veces pierdo la esperanza en las relaciones humanas lo compenso con la posibilidad de saber que expresarme emocionalmente siempre será un recurso que me lleve a flote.

No quiero despedirme sin antes agradecer de nuevo a Galería Beatriz Pereira la oportunidad de haberme hecho formar parte de esto, por creer en mi trabajo como artista y por ser un apoyo incondicional en el proceso. A mis compañera y artistas en el interior de la habitación 117 Carlota, Qorüja, Maravillas Artero y a Inés Alonso, comisaria del proyecto por haber estado presente defendiendo nuestra obra durante tres días seguidos.

 
 
 
 

Leí el otro día en esta publicación una descripción sobre el éxito con el que me siento bastante identificada, y en medio de toda esta vorágine de sensaciones no puedo omitir pensar en cuánto tiene de coincidencia que este año el día de mi propio cumpleaños fuese el mismo día que inauguramos Hybrid. Mi mayor regalo este año ha sido el arte, estar rodeada de la gente a la que quiero y sobre todas las cosas de este mundo, las palabras de mi madre que me escribe a mano y me recuerdan (como decía Pablo) que:

[…] Hay que volar a cada instante como
las águilas, las moscas y los días,
hay que vencer los ojos de Saturno
y establecer allí nuevas campanas.

[…] y tú aparecerás en otra estrella
determinadamente transitoria
convertida por fin en amapola.

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